Escribe: Rogger Alzamora Quijano
Para Cesaria Evora (Mindelo, Cabo Verde, 1947) el hecho de recibir el reconocimiento del público en todo el mundo es más importante que el de haber recibido el (verdadero) Grammy o la Medalla de la Legión de Honor de manos del presidente de Francia, u otras de las muchas condecoraciones por ella recibidas. Y el gran público la aclama principalmente porque su voz, de perfecta entonación -y sólo comparable con la de Mercedes Sosa o Susana Baca- lo desborda todo. Tal vez también tenga que ver su compromiso irreductible con sus raíces y su pueblo.
De figura sencilla y pies descalzos, Cesaria Evora muestra su calidez en cada interpretación. Su tesitura delicada y armoniosa pasea por toda la gama de graves y agudos. Elegante y exacta, deja para el placer de los oídos una discografía plagada de joyas que no permite saber cuál destaca sobre las demás sin arriesgar alguna injusticia indeseada.
Su sencillez sobresale también. Sus pies descalzos nos recuerdan que hay heridas de probreza y miseria que debemos cerrar un poco o mucho cada día, mientras la vemos desde nuestro lugar de oyentes deslumbrados con sus canciones.
No está demás recalcar que su emotiva música transmite mensajes a despecho de cualquier barrera: idiomática, social, económica o política.
Acompañada de grandes orquestas o pocos músicos, Cesaria Evora deleita con emotividad y nostalgia. Su voz es la luz de su pueblo, alegría y dolor hechos canción. Pone el dedo en las llagas de la injusticia, la esclavitud, la inmigración y la pobreza. Oir una morna en la voz de Cesaria es un tajo en el alma para el más rudo de los oyentes.
Hoy, que es una diva de renombre mundial, sigue manteniendo su espíritu contestatario y humilde, como cada día desde que comenzó a deleitarnos con sus canciones.
No dejar de escuchar:
1.- Sange de beirona. Elegí este para gozar con el infinito talento de Cesaria, la inmortal.
2.- Tiempo de silencio – Con Pedro Guerra
3.- Bésame mucho
4.- Carnaval de Sao Vicente
5.- Flor di nha esperança
6.- Cape Verde Manda Mantenha
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